GUARISMO DEL OCHO
Abrió plaza Plata Oliva frente a un novillo bien presentado de Aquilino. Desde el primer lance mostró una amplia gama capotera que levantó expectación en los tendidos. Brindó al público y se dispuso a torear con una muleta sostenida con las yemas de los dedos, evocando a los clásicos. Aprovechó con inteligencia el buen pitón derecho del animal, aunque fue por el izquierdo donde el novillo humilló con mayor nobleza y permitió al torero lucirse en tandas templadas y de buen gusto. La espada, sin embargo, le negó el triunfo: varios pinchazos dejaron su actuación en silencio.
El segundo turno fue para Pablo Hernández, que recibió con decisión a su oponente de Lola Domecq por chicuelinas, continuando con verónicas de buen trazo y una revolera frente al tendido de sombra. La faena creció con el toreo en redondo por la derecha, pero alcanzó su punto más alto al natural, donde Pablo bordó el toreo con hondura y gusto, arrancando la ovación unánime del público. Un estoconazo sin puntilla rubricó la obra, y el jurado no dudó: dos orejas y vuelta al ruedo para el novillo.
A Porta Gayola se fue Emilio Espigares, novillero de la Escuela Taurina de Jaén, para recibir a su enemigo de Las Monjas. El toro, flojo y escaso de recorrido, fue el peor lote de la tarde. Pese a ello, el jienense se mostró muy por encima de las condiciones del astado, robándole un par de tandas meritorias por el pitón derecho. Sufrió una voltereta al entrar a matar, se repuso con entereza y dejó una estocada eficaz. Silencio, pero reconocimiento del público por su valor.
El mejor presentado del encierro fue para Álvaro Hernández, que saludó con unas verónicas sublimes. La faena comenzó con temple y decisión, pero el novillo pronto se rajó y buscó las tablas, imposibilitando el lucimiento. El torero, muy atento, midió los tiempos y la distancia con inteligencia, aunque la falta de raza del animal y los fallos con la espada redujeron su balance a silencio.
El quinto en turno fue Pancho Romero, con un novillo de Los Millares que, de inicio, no quiso saber nada del capote. Pese a ello, Pancho, fiel a su entrega, se fue al centro del ruedo para citarlo con firmeza. El animal cambió de actitud en banderillas y repitió con clase en la muleta. El novillero bajó la mano y conectó con los tendidos, trazando tandas breves pero intensas. Sufrió una voltereta que no mermó su ánimo: se levantó y cerró su labor con temple y emoción. Tras un pinchazo y una estocada hasta la bola, cortó una oreja tras aviso.
Llegaba el turno de Álvaro Rus, y Baeza se volcó con su paisano. De rodillas en porta gayola, lo recibió con firmeza y luego bordó verónicas de alta escuela. Ya con la muleta, el joven toreó en redondo con naturalidad y personalidad, haciendo sonar la música. Por el pitón izquierdo extrajo muletazos templados y hondos, cerrando con desplantes toreros que hicieron vibrar al público. Faena bien medida, rematada con media estocada y un aviso. Una oreja y gritos de “¡Torero, torero!” acompañaron su salida.
El séptimo, Alejandro Aguado, no tuvo fortuna con el capote, pero en la muleta mostró entrega y decisión ante un novillo deslucido que no transmitía emoción. A pesar de las dificultades, su ilusión y su voluntad pudieron más. Tras un pinchazo y una estocada de ley, el público premió su esfuerzo con una oreja.
Cerró la tarde Gabriel Moreno ‘El Calé’, que dejó un bello saludo capotero a un novillo de noble embestida. Supo entenderlo y lo exprimió con inteligencia por el pitón derecho, toreando en redondo con ritmo y pureza. Al son de “Manolete”, ralentizó las embestidas y llenó la plaza de sabor clásico. Pinchazo y aviso, pero su actuación mereció una oreja que rubricó su tarde.
FICHA DEL FESTEJO
Sábado 25 de octubre de 2025
Plaza de toros de Baeza – (Jaén)
XXVI Encuentro Andaluz de Escuelas Taurinas.
Primer Festejo
Entrada: Casi media plaza.
Astados de Las Monjas, Los Millares, Aquilino Fraile, Martín Lorca, Condessa de Sobral, Chamaco, El Torero y Espartaco. La variedad de ganaderías ofreció un interesante mosaico de comportamientos
PLATA OLIVA, E.T. Baza; Silencio.
PABLO HERNÁNDEZ, E.T. Granada; Dos orejas y vuelta al ruedo para el novillo.
EMILIO ESPIGARES, E. T. Jaén; Silencio.
ÁLVARO HERNÁNDEZ, E.T. El Puerto Sta. Mª; Silencio.
PANCHO ROMERO, E.T. Chiclana; Oreja tras aviso.
ÁLVARO RUS, E.T. Baeza; Oreja.
ALEJANDRO AGUADO, E.T. Algeciras; Oreja.
GABRIEL MORENO ‘EL CALÉ’, E.T. Sanlúcar de Bdra; Oreja.
FOTO: JAIME ARANDA
