GUARISMO DEL OCHO
Morante salio inspirado con el capote en el toro que abrió plaza, dando excelentes lances de uno en uno a un astado que salía suelto. Fueron una auténtica belleza las verónicas brochadas con una larga del recibo y las del quite posterior. Juan Ortega aprovechó su turno para torear por delantales con compostura. Firmó un bonito comienzo de faena y se llevó al toro a los medios. Allí le dio una serie diestra templada y compuesta, aunque también logró naturales excelentes.
Morante tenía ganas y nos regaló momentos de gran belleza ante un toro noble y con calidad, pero limitado de fuerza. Se guardó para el final una última serie de naturales que fueron broche de oro. Sonó un aviso después del primer pinchazo y no estuvo fino con el acero.
Al cuarto lo recibió de forma original y sorpresiva, levantando al público de sus asientos. La faena la inició con bonitos muletazos por alto y enseguida se llevó al toro a los medios para torear encajado con la derecha. Cuando cambió a la zurda logró algún natural largo. En la ultima serie con la diestra atacó más y redondeó una faena en la que predominaron actitud, brillantez y genialidad. Se entregó y fue premiado con las dos orejas. Felicidad absoluta en los tendidos.
Juan Ortega bordó el toreo a la verónica en el segundo, sobresalilendo dos lances a cámara lenta por el pitón izquierdo. También hizo un bonito quite a la verónica abrochado con una media y otra más abelmontada. Comenzó la faena con muletazos compuestos, pero poco después el toro empezó a defenderse y a soltar la cara. Lo intentó al natural y tampoco tuvo la respuesta adecuada por parte del de Domingo Hernández. Mató de estocada y ovación
Juan Ortega se durmió literalmente a la verónica en el recibo al quinto, con lances por el izquierdo al ralentí. Sonó la música en su honor. También fue de gran belleza el quite por chicuelinas que bordó en este toro, al que siguió otro de Pablo Aguado. Ortega comenzó la faena marcando un ritmo lento con la muleta, pero al toro le costaba embestir limitándolo todo. Se paró muy pronto y se defendió.
Pablo Aguado no pudo lucir de capa en su primero, un toro que salió muy montado y huidizo, manseando claramente en los primeros tercios. En la muleta se centró y permitió a Pablo gustarse en un precioso comienzo de faena con una rodilla en tierra y preciosos trincherazos. Muy templado desde el primer momento toreó con suavidad con la derecha y más lento todavía al natura, por donde alcanzó más profundidad todavía. Todo lo hizo con templanza y compostura Aguado en una faena con momentos excelentes y toreo de mucha calidad en unidades. Falló reiteradamente con la espada, pero fue ovacionado.
En el sexto Pablo también apuntó buen toreo a la verónica, pero el toro se desentendió muy pronto y cortó en seco el recibo Este toro también echó el freno en la muleta y desarrolló sentido. Resultó un toro con mal estilo que impidió a Pablo hacer nada positivo aunque el torero se empleó también en este toro.
Ficha del festejo:
Se lidiaron seis toros de Domingo Hernández bien presentados y de juego desigual.
Morante de la Puebla. ovación tras aviso y dos orejas.
Juan Ortega ovación y ovación
Pablo Aguado, ovación y ovación.