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GUARISMO DEL OCHO – AITOR VIAN
Miguel Maestro es un humilde matador de toros a la espera de oportunidades tras no haber podido volver a torear después de tomar la alternativa en San Martín de Valdeiglesias allá por el 2019, y es que al diestro madrileño la pandemia le ha pillado en ese tramo en el que los toreros empiezan a despegar. Cabe recordar que Miguel Maestro es uno de esos pocos toreros que ha podido cortar un apéndice en la plaza más importante del mundo, Las Ventas, aunque quizás no tuvo la repercusión que dicho acto merecía. Y es que con este torero madrileño se cometió una injusticia, tras cortar una oreja el 24 de julio de 2016 en la primera plaza del mundo, no recibió ni una sola oportunidad más que la que tuvo en Madrid días después. A pesar de todo Miguel Maestro continúa peleando contra viento y marea para hacerse un hueco donde muchos toreros sueñan.
¿Cómo has pasado el 2020?
Bueno pues el 2020 lo he pasado prácticamente en blanco, hice bastantes tentaderos, maté algunos toros en el campo y tuve la suerte de llegar a actuar en público en un tentadero benéfico… Pero ha sido un año muy duro en todos los sentidos y más para el sector taurino. Aunque yo no he dejado de entrenar ni un solo día.
¿En qué momento te encuentras?
Me encuentro en un momento fantástico en el que se mezcla la madurez personal y la novedad profesional, ya que fue tomar la alternativa en septiembre de 2019 y a principios de temporada de 2020 se paró el mundo y no tuve oportunidad ninguna ni yo ni prácticamente nadie…
¿Cambiarías algo del pasado?
No me gusta cambiar nada del pasado, todo pasa por algo… Lo que sí que me gustaría sería volver al pasado sabiendo lo que sé ahora.
¿Es frustrante no haber podido torear después de tomar la alternativa a causa de la pandemia?
Más que frustración por no torear, hay tristeza, y ya no por mí, lo digo en general por todas las cuadrillas, ganaderos y todas las personas que de una forma u otra comen y viven del toro. Era muy triste ver como se marchaban para siempre muchos de los nuestros y como ganaderos enviaban al matadero camadas, e incluso ganaderías enteras. Lo mío es vocacional y el no poder vestirme de torero un año no me va a quitar ni la afición ni la ilusión.
¿Qué sentiste cuando saliste de la plaza después de haber tomado la alternativa?
Me sentí muy afortunado por varios motivos. Entre ellos porque por fin cumplía uno de mis objetivos y podía empezar de cero en un nuevo escalafón, porque mi guerra no estaba en las novilladas…
¿Han salido cosas para este año?
Para este año ya se van viendo las cosas de otro color… Por lo menos veo la luz al final del túnel. De momento van saliendo tentaderos y a la vista algunas corridas y festivales que ojalá se puedan dar.
¿Eres feliz como torero actualmente?
Sí, soy muy feliz. El hombre hace feliz al torero y el torero hace feliz al hombre… Lo mío es puramente vocacional, vivo por y para el toro y aunque muchas veces duela no estar anunciado en las ferias hago lo que me gusta y disfruto con ello. Cada entrenamiento, cada tentadero, cada corrida que veo como espectador… Mi obligación es estar fuerte y preparado para cuando llegue mi oportunidad. Así que soy feliz pero no estoy satisfecho.
¿Tienes miedo al fracaso?
Claro, todo el mundo tiene miedo al fracaso pero cuando uno se entrega en cuerpo y alma, cuando uno no se guarda nada, cuando uno lo da todo… Jamás se sentirá fracasado.
¿Qué meta individual te has puesto para este 2021?
No me convence la palabra meta, prefiero la palabra objetivo… Me gustaría confirmar mi alternativa y entre otras personalmente me encantaría volver a torear en San Martín de Valdeiglesias, ya que en la tarde de mi ceremonia de alternativa no pude expresar mi toreo como me gustaría…es una espinita que llevo clavada dentro.
¿Quién es Miguel Maestro?
A Miguel Maestro me gustaría que fuerais los aficionados quienes me describiérais. Yo solo intento hacer el toreo como lo siento interiormente. Se dice que se torea como se es.
