PATRICIA PRUDENCIO MUÑOZ

Una tarde especial, una tarde de “No hay billetes” y es que los rejones en el coso Alberto Balderas son el festejo estrella para los aficionados. Hoy parecían inundar los tendidos un público estricto, serio y prudente, a la espera de ver qué faenas desarrollarían los rejoneadores. Este lunes 12 de febrero, fueron Pablo Hermoso de Mendoza, Jorge Hernández Gárate y Cuauhtemoc Ayala los que dieron forma al cartel, que se midieron a los toros de la ganadería Boquilla del Carmen. Los animales dejaron mostrar un muy buen comportamiento y variedad, con salidas explosivas y embestidas manejables, obedientes y prontas que se ligaban con facilidad. Además, el festejo también contó con la actuación de los forcados mexicanos y portugueses, que salieron en los toros de Hernández y Ayala.

Pablo Hermoso fue el claro triunfador de la tarde, merecido consentido de los aficionados en México, cortándole las dos orejas al segundo de su lote tras una faena de distancias cortas, corriendo la plaza, bordeando las tablas. Hubo variedad y una entrega recíproca entre rejoneador y tendidos. El cariño, admiración y respeto con el que lo despidieron los aficionados del Carnaval de Autlán de la Grana, en la que es su gira de despedida, fue digna de premio para el respetable. Con el primero de la tarde no pudo excederse, se partió el pitón al rematar en tablas y se negaron a devolverlo, por lo que aprovechó la calidad de sus embestidas.

Jorge Hernández Gárate y Cuauhtemoc Ayala lo tuvieron a su alcance pero el uso del rejón de muerte, dejándolos defectuosos. Se midieron a toros con movilidad, atendiendo a las demandas de los rejoneadores. Ambos supieron llegar a los tendidos, sobre todo en el caso de Ayala, que se los ganó a base de reclamar su atención.

El protagonismo lo tomó Roberto Gómez “EL Zorrillo” por el quite que llevó a cabo durante el sexto por chicuelinas. Tanto fue que el público demandaba su presencia cada vez se producía el cambio de caballo.