PATRICIA PRUDENCIO MUÑOZ
El matador de toros Calerito se enfundará el traje de luces este sábado 22 de abril en la localidad madrileña de San Martín de Valdeiglesias. Hará el paseíllo junto con Juan del Álamo y Mario Palacios, para medirse a los de Castillejo de Huebra y Salvador Gavira-García en la segunda semifinal de la Copa Chenel.
Alcanzó su pase tras su actuación en Torres de la Alameda, firmando una de las mejores faenas de lo que llevamos de la Copa Chenel, con un gran ejemplar de Concha y Sierra. “Las sensaciones fueron muy buenas, empezando la temporada a un gran nivel, con un toro muy importante que pude cuajar de la manera en la que yo siento el toreo. Estoy muy contento de que me saliera una tarde como esa”, recordaba el diestro aquella segunda corrida de toros clasificatoria.
El bombo decidió su destino, llevándolo directo a San Martín de Valdeiglesias. Las sensaciones fueron buenas, lo afronta con ilusión, “es una plaza muy buena con dos ganaderías a la que tengo mucha Fe”. Añadía: “Sobre papel estoy contento, a ver cómo se desarrolla el sábado”. Sin embargo, Calerito no ha tenido la oportunidad de medirse a ellas previamente, pero espera que embistan, “son dos ganaderías de garantías”.
La terna la componen Juan del Álamo, Mario Palacios y el sevillano Calerito, que será el encargado de cerrar la tarde. “Me parece un cartel muy bonito e ilusionante, también para el aficionado, con dos toreros que van a apretar. Yo voy con mi arte, pensando en mí y en mis dos toros, cada uno tendrá los suyos”, comentaba sobre la configuración de la tarde.
En menos de una semana de diferencia, ha hecho el paseíllo en Sevilla y el sábado lo hará en la segunda semifinal de la Copa Chenel. Dos compromisos muy importantes que requieren su correspondiente preparación. Sin embargo, explica: “La preparación ha sido la misma que he tenido siempre, no he cambiado nada, entrenando lo mismo cuando tengo fechas y cuando no”.
La Copa Chenel es uno de los formatos más importantes del panorama taurino y los matadores de toros son conscientes de ello, por ello saben que es necesario aprovechar las oportunidades, sin dejarse nada. “Ganar la Copa sería un empujón muy grande a mi carrera, le hace mucha falta ahora mismo. Por ese motivo, voy a salir como salí en Torres, a ser yo, a expresar mi concepto, a marcar la diferencia. Eso el público lo vio”.
Culminaba sin olvidarse de otra pieza clave para la Tauromaquia, los aficionados. “Los aficionados tienen que ir a la Copa porque es un cartel con un gran aliciente, con toreros que quieren despuntar y relanzar sus carreras. Por la necesidad que tenemos los toreros, vamos con más ganas aún, así que habrá rivalidad y competitividad entre todos”.
