CHEMA URUEÑA

Tarde calurosa en Sanse, poco más de un cuarto de Plaza. Corrida del Arte de Rejoneo.

Rui Fernández, Sergio Galán y Andrés Romero ante un encierro de la Ganadería de Luis Terrón .

El primero toro de capa negra correspondió en suerte y lidia al caballero Rejoneador Rui Fernández, toro distraído y sin fijeza, hizo que tuviera que clavarle el primer rejón de castigo sorprendiendo al toro, ya que no se fijaba en el caballo. El segundo rejón hizo que toro tomara algo más de fijeza. Comenzó el segundo tercio con una banderilla en los medios poniendo en apuros al caballero, otro par de banderillas ahora si con el toro más centrado, sacó los oles del público una banderilla luciéndose y a por las banderillas cortas, 3 banderillas puestas con arte y maestría. Tercio de muerte con estocada caída, hizo que el toro tardara unos minutos en morir.

El segundo de la tarde otro toro de capa negra muy bien presentado y con mucho genio de salida hizo que Sergio Galán tuviera que emplearse para ahormar su embestida, solo un rejón de castigo le valió al toro, pasando así al segundo tercio, tres banderillas, una de ellas puesta al quiebro subió el ánimo del público sonando las palmas en los tendidos. Otra banderilla más toreando al toro con la grupa del caballo, hizo que los tendidos se pusieran en pie. 3 banderillas cortas con mucho arte. Un rejón de muerte bien colocado y el toro a tierra. Una oreja con petición de la segunda.

Tercer toro muy en el tipo de esta ganadería. Con una embestida distinta a sus dos hermanos anteriores Andrés Romero templó y mando. En banderillas el toro y el primer rejón de castigo se quedó enganchado en el toro y estuvo buena parte del tercio con el colgando, dos rejones más dieron paso al tercio de banderillas, el cual comenzó toreando al toro con maestría y luciendo al caballo, las palmas del público presente no se hicieron esperar. Al quiebro y en los medios puso a los asistentes en pie. Otra banderilla más y las cortas, tres banderillas,. Arte en la cuadra de este Rejoneador, caballos muy Toreros. Un pinchazo con el rejón de muerte hizo que tuviera que descabalgar y descabellar al toro. A la primera y con una gran maestría. Una oreja.

El cuarto de la tarde fue recibido por el rejoneador Luso con mucha templanza y torería. El primero de los 2 rejones de castigo fue muy protestado por el toro que se dolió. El Segundo y con el toro más templado dio paso a las banderillas. Con los cuatro palos en lo alto se pasó a las banderillas cortas, tres rosas muy engalanadas donde el toro acusó la justeza de fuerza que tenía. El rejón de muerte, donde el jinete tuvo que poner todo, ya que el toro no le ayudó , 3 pinchazos y el cuarto, fue el que hizo que el rejón de muerte diera con el de Terrón al suelo. Leve petición de oreja, la cual el presidente concedió y no debería haber sido así, para mi humilde opinión.

Como dice el dicho, no hay quinto malo. Sergio Galán salió a por todas, ante un toro muy cuajado y a la vez muy parado, tres rejones de castigo encelando al toro por todo el ruedo levantó los oles del público. En el tercio de banderillas el rejoneador de Tarancón puso emoción y sabiduría, alentando al público a meterse en la faena y así fue. Las banderillas cortas es donde otra vez se volvió a notar la falta de raza que acusó el encierro de Terrón.

Pinchazo y medio rejón de muerte, hicieron descabalgar al jinete este teniendo que descabellar a la primera. Fuerte petición de oreja, la cual el presidente no tardó en mostrar ante la gran petición del público, no le quedó otra que conceder otro apéndice. Dos orejas.

La noche cayó en el sexto de la tarde y los focos de la Tercera comenzaron a iluminarse. Brindó el toro a un familiar que se encontraba en el callejón. Salió el último un toro muy cuajado de Terrón de capa negra al cual Andrés Romero acompañó desde su salida llevando a la grupa del caballo. Dos rejones de castigo dejándose llegar mucho al toro, sacando la ovación de los allí presentes. Cinco palos son los que colocó al toro, no poniéndoselo nada fácil al rejoneador. Las cortas donde el toro se vino arriba, dieron paso al tercio de Muerte .El toro de Terrón alcanzó al Caballo de Andrés Romero haciendo que cayera al suelo y tuviera la suerte del que toro no le alcanzara, pero el golpe que se llevó fue tremendo. El rejoneador estuvo unos momentos en los cual pareció marearse. Quito a los hombres de su cuadrilla y volvió a la cabalgadura, para poner un rejón de muerte en todo lo alto. Tuvo que coger el descabello y a la primera el toro patas arriba. Dos orejas ganadas a ley.

Ruiz Fernández: Silencio y oreja.

Sergio Galán: 1 oreja y 2 orejas.

Andrés Romero: 1 oreja y 2 orejas.

Ganadería Luis Terrón.