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El sexto encierro de San Fermín lo protagonizaron los astados de Jandilla. AL principio tomó la delantero un toro, pero después de pasar Mercaderes y entrar en Estafeta la cabeza del encierro la tomó también el cabestro, acompañando al de Jandilla. El recorrido se completaba en 2 minutos y 20 segundos, rápido y limpio.
Llegando a la plaza de toros uno de los astados perdía las manos, quedando un mozo entre los pitones. Afortunadamente, quedó en un susto. Después llegaría la entrada al coso, donde uno de los corredores fue prendido y arrastrado varios metros.
Hubo carreras, al estirarse tanto la manda, dejó que muchos tomaran la cara del toro.
El primer parte provisional de heridos confirmaba cinco heridos, uno de los cuales por asta de toro en el brazo izquierdo. El resto de traslados han sido un traumatismo en tórax, dos contusiones, una en brazo y otra en columna y un herido por pisotón.
