Manuel Casado es un novillero andaluz con una capacidad innata de entender lo que la tauromaquia está demandando hoy en día, y es que el torero de Lora del Río reúne todas las facultades para marcar un antes y un después en la tauromaquia. La mezcla de la espectacularidad en banderillas y la pureza en la muleta hacen de él un torero único y necesitado en la tauromaquia de la actualidad. Este 2021 lo afronta con ansia de triunfo y ganas de hacerse un hueco en la parte alta del escalafón.

Me encuentro en un momento muy bonito, mejor que nunca y sintiendo el toreo como yo quiero, expresando mi concepto.

En México tuve unas sensaciones muy buenas, me gusta mucho la embestida mexicana, se siente el toreo muy despacito y con mucho gusto.

Para mí, mi tierra significa lo más grande, ya que me ha visto crecer como persona y como todo, lo es todo para mí.

Pues yo creo que ni más fácil ni más difícil, sino que cuando uno torea cerca de su gente y están a tu lado, se siente uno mucho más arropado.

Muchísimo, la mentalización es fundamental, desde siempre me lo han dicho y creo que es así, la verdad.

Sí, el fracaso es un enemigo más para mi, sin triunfo no hay gloria, y con el fracaso no llega uno a ningún lado.

Pues yo creo que no, porque es lo que uno quiere, ser torero y vivir día a día de esta bonita profesión.

Pues veo que esta pandemia ha sido muy fuerte para todos, y Dios va a querer que remontemos muy pronto, seguro.

Sueño con triunfar día tras día y ser figura del toreo siendo siempre fiel a mi concepto.

Pues Manuel Casado es un chaval que sueña con ser figura del toreo y que sueña con sentir el toreo a diario junto a su gente siempre.

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