sábado, 4 de mayo de 2024

Salvador Cortés: “Vivimos gracias al toro y es el momento de devolvérselo”

Facebook
Twitter
WhatsApp

 Entrevista

JAVIER ESPADA ROMÁN 


  

Desde hace unos años, Salvador Cortés (1981), compagina su
faceta de matador de toros con la de empresario y organizador de festejos. En
estos años, ha cosechado éxitos como empresario, pero también ha conocido los
sinsabores económicos de un sector extremadamente complejo. Esta temporada, la
del quince aniversario de su alternativa, ha organizado y toreado un festejo en
Andújar (Jaén), donde protagonizó un indulto no exento de polémica. Ahora, en
su afán por impedir que los toros de bravo sigan teniendo el matadero como
destino debido a la nefasta situación, intenta sacar adelante una interesante
propuesta para los meses de este inverno que conjuga el campo con las redes
sociales.

Como con tantos otros matadores del
escalafón, la pandemia ha impedido la celebración de los 15 años de doctorado
del diestro sevillano Salvador Cortés. En el tintero quedaron varias corridas
de toros y una comparecencia prevista para este año en la feria de San Isidro,
pero “la pandemia le ha cambiado la vida a todo el mundo y los planes se han
ido al traste” explica el diestro sevillano.

Sin embargo, Salvador fue uno de
los toreros que tuvieron la fortuna de haber toreado un festejo en la época
previa al coronavirus. Fue el 28 de febrero en la localidad sevillana de
Cantillana en una corrida de toros mixta con dos rejoneadores organizada por la
Hermandad de la Divina Pastora. “Se llenó la plaza y lo pasamos genial” explica
un Salvador Cortés que aún era ajeno a lo que se le venía encima.

“Perdí mucho dinero como empresario por todo lo que conlleva la
preparación, el tiempo dedicado y los viajes”.

Los varapalos económicos llegaron
con la suspensión de los festejos organizados para Andújar y Villaluenga del
Rosario, que no se celebraron por las restricciones sanitarias. “Perdí mucho
dinero como empresario por todo lo que conlleva la preparación, el tiempo
dedicado y los viajes” reconoce el hispalense, que no duda en calificar las pérdidas
económicas como “un palo muy gordo”.

El avance de la pandemia y la
mejora de la situación permitieron un respiro que Salvador aprovechó para
reprogramar el festejo de Andújar el 6 de septiembre en un cartel en el que se
anunció con Diego Ventura y Sebastián Castella con reses de Juan Pedro Domecq.  Finalmente, el francés se cayó del cartel de
manera precipitada y Salvador tiró para delante con los cuatro toros para la
lidia a pie. “Fue una cosa muy extraña porque él estaba ilusionado, pero lo
entendí cuando anunció su retirada de los ruedos. Tenía la mente puesta en eso
y vio que era lo mejor” explica el empresario.

Sin la caída de Castella del
cartel, Salvador Cortés no se hubiera encontrado con “Envilecido” de Juan Pedro
Domecq, el toro que indultó aquella tarde y para el que sólo tiene buenas
palabras. “El toro se ganó la vida, fue de indulto porque desde el capote
embistió muy bien, empujó en el caballo y hubo que insistir para que saliera, y
en la muleta fue a más y nunca se vino abajo, no paró de embestir” señala el
espada, que tras el festejo fue a ver al toro al campo y participó en las
labores de sanación. Ahora, tal y como confirma el diestro sevillano,
“Envilecido” ya está cubriendo en la ganadería de Juan Pedro Domecq.

“No me paro cuando veo una polémica que es injusta. Sé que el toro fue de
indulto, lo disfruté y lo publiqué porque estaba satisfecho”.

No obstante, algunos aficionados no
estuvieron muy de acuerdo con el indulto y no perdieron la oportunidad de
expresarlo en las redes sociales, quizá de una manera un tanto exaltada en pleno
auge de la indultitis. Ahora, con la
perspectiva del tiempo, Salvador le quita importancia y zanja el asunto: “No me
paro cuando veo una polémica que es injusta. Sé que el toro fue de indulto, lo
disfruté y lo publiqué porque estaba satisfecho, por eso no quiero perder el
tiempo personas que no conozco. Que se hable es normal, pero son una minoría”.

En estos tiempos no aptos para
pesimistas, Salvador Cortés ha llevado a cabo diferentes proyectos y
actuaciones como empresario para aportar su granito de arena en esta situación
tan complicada. Ya en pleno confinamiento, hizo pública una carta en la que
daba su opinión sobre los errores que estaba cometiendo el sector. “No
solamente podemos mirar el dinero, sino lo que el toro nos ha dado a nosotros y
lo que yo quería hacer llegar es que eran momentos de luchar para el toro. No
todo es ganar dinero, vivimos gracias al toro y era el momento de devolvérselo
porque eran injustas las muertes de los toros en los mataderos”, señala el
hispalense.

“Estoy planteando hacer un pequeño certamen de novilleros y otro de
matadores de toros para este invierno”

Después, se sumó a las novedosas
emisiones a través de streaming desde el campo, con las que la tauromaquia
llegó a muchos hogares en unos momentos en que los aficionados tenían hambre de
ver toros. El resultado fue tan positivo que Salvador Cortés revela que “está
planteando hacer un pequeño certamen de novilleros y otro de matadores de toros
para este invierno. Queremos hacerlo abierto para que pueda verlo todo el mundo
aunque sea en el campo, pero no es fácil porque todo es muy costoso y estamos
barajando el tema de la publicidad” explica el matador.

Si las cosas para un empresario son
realmente complicadas en una temporada normal, con la pandemia las dificultades
se han multiplicado. Sin embargo, Salvador Cortés mantiene su compromiso aún
asumiendo que “es algo complicado y arriesgado porque te puede costar tu casa.
Hay que saltar los obstáculos y dar movimiento al tema. Son muchos
inconvenientes, muchas llamadas, pero hay que seguir luchando” explica el sevillano.

A todas estas trabas, en el caso de
Salvador, hay que sumar la dificultad de compaginar su labor como empresario y
como torero. “Es difícil porque son muchas horas de viaje, reuniones, pero
desgraciadamente, como no estoy anunciado en cuarenta ferias, puedo dedicar
tiempo a estas cosas” expone Salvador, a la vez que explica que “en su
trayectoria como empresario hay cosas que le han salido mal y otras bien”. El
año pasado, su empresa, Resaso Eventos, programó 10 corridas de toros y este
año la idea era “continuar creciendo”.

“No me encaja que en las plazas grandes no se haya dado nada”

Como empresario, analiza la actitud
de sus compañeros durante esta crisis y reconoce que “no le encaja que en las
plazas grandes no se haya dado nada. No sé por qué no se han hecho las cosas,
ahora está más difícil, pero en meses anteriores se podía haber hecho. En
plazas como Madrid nunca se ha llenado al 50% por ciento ni una novillada ni
una corrida de toros. Por eso, me extraña que no se hayan lidiado toros en
estas plazas con el 50% del aforo. Pero hay cosas que desconocemos. Supongo que
si hubiera sido rentable lo hubieran hecho, pero no entiendo por qué no se ha
abierto ese circuito de corridas de toros para toreros de segundo grupo, para
ganaderías que están en un buen momento y que no han podido lidiar otros años”.

Por eso, aunque augura un año 2021
extremadamente difícil para el sector, y en el que “es complicado que haya
toros a principios de temporada”, recuerda su compromiso con el toro y con la
fiesta y lo tiene muy claro. “Vivimos del toro y es el momento de
devolvérselo”.

 FOTO: DIARIO JEREZ Y SALVADOR CORTÉS

Entradas Relacionadas

Scroll al inicio