Reseña

GUARISMO DEL OCHO

Recibió al primer novillo de El Pilar en la puerta de chiqueros de pie con unas saltilleras. Seguidamente, toreó a la verónica rematando con una revolera, para después hacer un quite por chicuelinas bastante armónico. Inició la faena de muleta desde los medios, de rodillas , toreando al natural, para seguir con un toreo en redondo muy reposado y con gusto. Con la zurda tuvo naturales estimables. Terminó con unas bernadinas para que después de un pinchazo y una estocada desprendida acabara con el novillo. Una oreja.

El segundo novillo se pegó un encontronazo contra el burladero y se mató en el acto. Estuvo muy  bien Manuel Diosleguarde con el sobrero de la misma ganadería, al que supo templar las embestidas y mantenerlo para que no se cayera debido a su escasa fuerza. Toreó con temple y gusto por ambas manos. Mató de estocada caída. Una oreja.

Francisco Montero recibió al tercero a portagayola con una larga cambiada con el capote de paseo. Salió arrollado del encuentro con fuertes golpes. Después, en el tercio de banderillas, salió arrollado el banderillero José Ignacio Martín. Comenzó la faena doblándose por bajo, una faena que estuvo repleta de desarmes y enganchones debido a la mala condición del novillo. Al echarse la muleta al pitón izquierdo resultó volteado con ciertas magulladuras y al parecer herido en el muslo izquierdo. Salió enrabietado como los novilleros de antaño, con un amor propio. Después de despachar una estocada arriba le otorgaron dos orejas.

Manuel Diosleguarde lanceó muy bien a la verónica al cuarto de la tarde. Fue el novillo de más condición, al que Manuel realizó una faena de buen trazo por ambas manos, dejando patente la calidad  de su toreo. Mató de estocada caída. Una oreja.

Herrera del Duque. Novillos de El Pilar para Francisco Montero, oreja y dos orejas; Manuel Diosleguarde, oreja y oreja.