Artículo de opinión
PATRICIA PRUDENCIO MUÑOZ
Lo llaman nueva normalidad pero todavía no saben lo que es la democracia, les invitamos a nuestro mundo, aquel que tanto desprecian y les incomoda. Una lección de Tauromaquia equivale a 20 años de vida, porque aporta unos valores de los cuales ustedes carecen. No les digo que vayan a una plaza de toros, porque para depreciar el arte es mejor quedarse en casa buscando como locos, las vueltas a nuestro sector.
Si para ustedes vivir en un país donde el SEPE niega las ayudas a los profesionales del sector es la nueva normalidad… queda un poco lejos de la igualdad deseada o, al menos, de aquella de la que tanto presumen. Aunque quizá nos lo pueda aclarar Irene Montero, defensora de las causas perdidas. Aunque más que perdidas, de aquellas que dan su voto.
Vivimos en un país donde si no te levantas del sofá podrás recibir un sueldo Nescafé y lo más importante, sin tener que coleccionar los códigos de barras. Mientras tanto los profesionales no reciben ingresos y el campo se muere, aunque parece que al responsable de turno no le importa. Y sí, no len vueltas, estoy apelando a Teresa Ribera, Vicepresidenta y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico.
La Tauromaquia es el oxígeno de España, ustedes decidan si quieren morir asfixiados por la ignorancia, la arrogancia, la inconsciencia, la mentira y una lista interminable… Sin embargo es mucho más fácil crear una realidad alternativa, tal y como defendió en 2017 Kellyanne Conway, consejera de Donald Trump, en Estados Unidos. Es más, les voy a ahorrar el sufrimiento de investigar, que ya sé que les produce cierto rechazo aquello de ahondar para conocer. Construir hechos alternativos no es más que transmitir falsedades, es decir, negar evidencias empíricas para crear la realidad deseada.
Esto señoras y señores es a lo que se dedican desde nuestro Gobierno, generando una realidad alternativa en la que pretenden convencer a los indecisos de los efectos nocivos que tiene la Tauromaquia sobre nuestra sociedad.
Por cierto, para que no se equivoquen, digo que la Tauromaquia es el pulmón y el oxigeno de España, porque resulta que es así. Las dehesas, los ecosistemas… en el toro todo es naturaleza y ustedes no quieren acabar con ello, ¿verdad? Me defraudarían, son “supuestamente” los principales defensores de la naturaleza.
Seamos sinceros, les ciega el rencor y el odio, porque han politizado algo que NO ES POLÍTICA. Enterémonos de esto, el toro no es un lucha política, el toro es una lucha cuerpo a cuerpo en la que la verdad y la democracia priman sobre cualquier cosa.
Por último, como recordatorio debo hacer referencia a la presencia de los niños en los festejos taurinos. Ustedes son aquellos que luchan porque los niños tengan capacidad de decisión, sin embargo, les quieren cohibir. Qué contradicción, lo pienso y me doy cuenta de que cada vez tenemos menos libertad y capacidad de decisión…
