Mario Arruza recibía a «Jarreto», un novillo castaño de la ganadería Gómez de Morales, con un saludo capotero suave y con temple rematado con una media. Realizó una réplica lucida por tafalleras y caleresinas. En el tercio de banderillas su banderillero sufrió un golpe contra las tablas sin consecuencias aparentes. Comenzó la faena probándolo por ambos pitones, intentando que humillara. Por el pitón izquierdo se desplazaba alargándole la embestida, le daba tiempo y volvía sobre el mismo pitón  para acabar la tanda con un trincherazo y un pase de pecho. Con la mano derecha el animal echaba la cara arriba, intentaba dejársela puesta y tirar de él. Culminó la faena por bernardinas para dar paso a la suerte suprema, la cual tuvo que ejecutar hasta en tres ocasiones.

Álvaro Chinchón recibió al segundo de la tarde con dos faroles de rodillas, para seguir de pie a la verónica y rematarlo con una media. También replicó con lucimiento, cerrando con una rebolera. Comenzó la faena en los medios, con un pase cambiado para después darle una tanda con fuerza en la que le bajó la mano. Lo llevó en largo, templándolo, un novillo con recorrido que buscaba las tablas. Por el pitón izquierdo los naturales carecían de ritmo, aunque con torería y buena colocación. Con la mano derecha le encelaba y bajaba la mano llevándolo muy cosido. El espada estaba cómodo y con mucha seguridad por este último pitón, dejando unas muy buenas tandas. Cerró por manoletinas, un pase de pecho y un molinete. Falló con los aceros. 

Nacho Torrejón  recibió a «Alpargatero», un eral negro con buen cuello, al que paró con unos buenos lances de recibo y una tanda de verónicas. Comenzó la faena genuflexo, probándolo por ambos pitones y sacándole del tercio con buen ritmo y un cambio de mano. Le llevó en largo por el pitón derecho con  estética y lucimiento, con la mano izquierdo tenía mejores condiciones, le giraba la muñeca y le alargaba la embestida, logrando algún pase de pecho bien enroscado. Calaba en los tendidos. Remató la faena por manoletinas y un muletazo por abajo. Se perfiló en la  suerte contraria, aunque no hundiría el acero tras varios pinchazos.

Mario Arruza enceló al cuarto de la tarde en su capote con temple y personalidad. Comenzó la faena  de rodillas en los medios  con la mano derecha, consiguiendo una tanda emocionante rematada con un pase de pecho. Siguió con la izquierda, donde iba con mayor desorden, por lo que volvió a la derecha  aunque volvería a retomar el pitón izquierdo, sin lucimiento. Con la mano derecha, más permisivo, se le ve con más dominio al novillero, más cómodo. El animal iba justo de fuerzas y no permitía el lucimiento, aunque Arruza insiste con buen toreo, pero es difícil con el uno a uno. Cerró la faena de rodillas por manoletinas y un pase de pecho. Mató al segundo intento, tras resbalar en el primero y recibiendo un golpe en la rodilla derecha.  

Álvaro Chichón paró con lucimiento en su saludo capotero al quinto de la tarde, «Gobernante». Tomó la muleta  y comenzó con la mano derecha genuflexo, probándole por ambos pitones, siguió con la derecha dándole profundidad  y alargando la embestida del animal. Marcando carácter y buenas maneras  tomó la muleta con la izquierda logrando una tanda lucida y plástica, le llevaba en largo y con temple, tenía un novillo con transmisión y recorrido. Volvería sobre el derecho dejando beunas tandas con muletazos profundos de buen trazo. Cerró genuflexo, para después hundir la espada a la primera, algo trasera y desprendida.

Nacho Torrejón  recibió a «Alcaraban» en su capote por delantales, rematando con un media. Tras brindar al público, comenzó genuflexo, para seguir con una tanda por la derecha rematando con un pase de pecho. Cambió de pitón, intentando construir la faena, sin embargo, por el izquierdo iba más descompuesto y con la cara alta, a pesar de ser obediente. Retomó el pitón derecho con torería  y seguridad, aguantando algún parón del novillo. No cejó Nacho en su empeño de sacar lo mejor del animal. Concluyó con molinetes  y pases de pecho para perfilarse en suerte contraria y pinchar, mató al segundo intento con media estocada ligeramente tendida.