PATRICIA PRUDENCIO MUÑOZ
El matador de toros Tomás Campuzano inicia su andadura en la Escuela Taurina de Lucena como profesor. Lo hace con una visión muy clara y asentando las bases de los que serán el futuro de la Fiesta. Además, continúa al frente de las carreras profesionales del matador de toros El Chorlo, de los novilleros Bruno Aloi y Mariscal Ruiz y de las jóvenes promesas Daniel Fernández y Mauro Macandro. Esto es algo que le llena de ilusión, definiéndolos como toreros muy válidos y capaces de hacer que las faenas no decaigan a pesar de las condiciones que les hayan tocado en suerte. Campuzano es muy realista, pero también muy optimista, sabiendo que el futuro de la Fiesta pasa por nuestras manos, dando la cara y enseñándola a todos los que se quieran acercar y aprender. En definitiva, el maestro sevillano amasa y seguirá amasando el futuro de la Tauromaquia.
¿Cuál es el papel que desempeñas como profesor en la Escuela Taurina de Lucena?
Mi inclusión en la Escuela llega el año pasado, que estuve echando una mano como profesor en la Escuela de Camas con el maestro Almendro. Decidí hablar con ellos, observando que los chavales necesitaban gente allí o, al menos, alguien que les guiara en los entrenamientos. Estuve yendo a la Escuela de Camas una o dos veces por semana, la misma Escuela de la que salió Mariscal Ruiz, que fue la sensación del año pasado.
Dejé la Escuela de Camas y me incorporé a la de Lucena, pero durante el año pasado esta no había tenido, prácticamente, actividad. De esta manera, los que la dirigen, que son los dueños de la plaza de Toro de Lucena, me hablaron porque querían que yo estuviera como profesor y les echara una mano. La verdad es que lo pensé, porque no está cerca de donde vivo e iba a estar más tiempo en la carretera que allí. Hablé con ellos y decidí incorporarme como profesor, incluyendo y ayudando a unos cuantos chavales que entrenan conmigo y que no están en ninguna Escuela Taurina.
Lo fundamental para los chavales es que aprendan el oficio, que cada uno tenga su propia personalidad y desarrolle su toreo. Por eso, mi labor como profesor es intentar perfeccionar, que conozcan los terrenos de los animales, la distancia, los ritmos de cada pase, cómo hay que ejecutarlos, terminarlos, iniciarlos o saber dónde colocarse. En definitiva, que tengan oficio para que cuando se pongan delante del animal tengan un poco de idea y no se pongan allí sin saber. Es una de las cosas que a mí siempre me preocupa muchísimo, que cuando estén delante de la cara de los animales sepan pensar y, sobre todo, que sepan qué les está pidiendo el toro para poder hacer faena, porque todos los toros tienen su faena.
¿En qué basas tus clases en la Escuela?
Una de las cosas que primero les enseño es que el capote, la muleta o la espada tienen que ser un complemento más de su propio cuerpo. Tú cuando vas a mover un brazo no le pides permiso al cuerpo para moverlo, sino que lo mueves de forma intuitiva. Cuando estás toreando lo único que tienes que pensar es en cómo es el toro, lo demás te sale solo porque lo tienes muy entrenado.
Los tiempos han cambiado, ¿es mucha la diferencia entre tus inicios y los de los chavales que ahora tienes en tus manos?
En aquella época ya había alguna Escuela, de hecho, mi hermano José Antonio salió de una Escuela de Alcalá del Río, pero yo no, yo he aprendido a base de ponerme, sin ninguna técnica, nadie me la había explicado. Entonces, cuando no tienes oficio llegan los porrazos, pero ahora cuando los chavales van aprendiendo son los profesores los que deciden cuándo se pueden poner delante de un toro o una becerrita. Esto es un aprendizaje, no se trata de llegar, ponerte delante del toro y arréglatelas como puedas, eso era antes. Ahora te explican todo, cómo colocarte, ponerle el pecho, la muleta y la panza para que el toro venga metido en la tela.
Pienso que cuando uno sale es porque realmente lo trae muy trabajado, sabiendo perfectamente lo que tiene que hacer delante del toro. Quizá, con todo eso, se pierda un poco la inocencia, esa que se necesita para cruzar la raya imaginaria, esa que es tan peligrosa. Hay muchos que ya lo saben y a lo mejor no se atreven a pasarla, es ahí donde definen sus límites.
El que quiere ser figura y conoce todas las reglas del toreo, sabiendo dónde está la raya y la traspasa, ese es el que tiene condiciones. Tiene la capacidad para ser una gran figura del toreo.
¿Cuáles son los mayores obstáculos a los que se tienen que enfrentar estas escuelas?
El más complicado es el de la preparación con animales, los toreros se hacen toreando. Tú puedes aprender el oficio, puedes entrenar muchísimo, pero para luego llevarlo a cabo se necesita una serie de tiempos con los animales, algo que hoy en día… No todas las Escuelas pueden hacer un tentadero o que un ganadero te abra las puertas. Es cierto que hay Escuelas que están más organizadas o tienen más medios para poder preparar a los chavales, pero no todas. Por este motivo, las novilladas como las que se hacen en Canalsur están muy bien preparadas y cuentan con una audiencia tremenda. Gracias a ellos, los ganaderos se dan también a conocer.
Los que estamos empezando, como la Escuela de Camas, el año pasado solo hizo tres tentaderos y con tres no se pueden preparar los toreros. Ahora en la de Lucena me tengo que volver loco llamando a los ganaderos para que, por lo menos, nos dejen ir de tapia, esperando una oportunidad como se ha hecho toda la vida. Pero, en este caso, con la representación de un profesor y la escuela. Esto también te curte y aprendes a valorar que llegar a tus metas no es tan fácil. Cuando se consigue todo eso, tiene mucho más valor. Para hacerse torero se necesita muchísima afición y dedicación, a lo que se suma el valor, todo lo demás se puede perfeccionar.
Hablemos también de tu labor al frente de las carreras de los novilleros punteros Bruno Aloi y Mariscal Ruiz; del matador de toros Jesús Díez «El Chorlo» y de los jóvenes que están empezando como es el caso de Daniel Fernández y Mauro Macandro.
Sigo con Bruno Aloi, que es un torero muy aventajado, un torero que tiene unas cualidades extraordinarias. Empecé a seguirlo el año pasado a través de internet, viendo vídeos y fotos, pero fue a finales de la Temporada 2022 cuando le vi por primera vez. Me fui a un pueblo en la Sierra de Granada para poder verlo, porque después se iba a México. Cuando lo vi torear aquella novillada, una novillada bastante fuerte, me pareció extraordinario, cortó cuatro orejas, arrimándose con desparpajo y mucha cabeza. Me cautivó. Se lo dije a su apoderado, a Justo Jiménez, que había que tenerlo muy en cuenta y había que ayudarlo. Esas cosas son las que me ilusionan muchísimo.
Después de aquello, regresó a México y allí debutó con caballos, triunfando. En febrero decido viajar a México para estar con él allí, verlo en el campo, conocerlo más de cerca, saber cómo eran sus entrenamientos. Al inicio de Temporada vuelve a España y empieza su andadura en el mes de febrero, en una novillada del Día de Andalucía en Navas de San Juan, donde causó sensación, que eso es lo realmente complicado. Sin embargo, no se quedó ahí, sino que también estuvo a un gran nivel en Villaseca de la Sagra, al día siguiente toreó en Sotillo de la Adrada con una auténtica corrida de toros y lo bordó.
Terminó toreando en España un total de ocho novilladas, en las que en muchas de ellas dio una actuación extraordinaria, de todo lo que lleva dentro como torero. Estoy deseando que le abran las puertas en las plazas importantes, porque ya tiene un rodaje muy bueno, plazas como la de Sevilla, Madrid Pamplona o Bilbao. Tiene unas grandes condiciones, con cualidades para sorprender y para que todo aquel que lo vea se dé cuenta de que tiene madera y mucho futuro. Estoy muy ilusionado con él, de hecho en México ha dejado muy buenas sensaciones y sigue toreando, ahora tiene dos festejos más antes de regresar a España, uno el 7 de enero en Autlán de la Grana y otro el 20 en el Palacio del Arte de Morelia.
Una vez en Europa, a primeros de febrero ya va a estar toreando aquí, por lo que va a ser una Temporada bonita, llegará más hecho y va a sorprender, será la sensación como torero cuajado y poderoso. Es un torero que sabe llegar al público, toreando muy templado, con valor seco, raza y mucha cabeza, asentando el toreo, no se arrima a lo loco, sabe dónde se pone y cómo se pone, apostando y arriesgando en el momento que corresponde.
En el caso de El Chorlo, le di la alternativa y hemos estado luchando solos. Es un torero muy bueno y con una dedicación, preparación y afición desmedidas, así que cuando encuentras a un hombre así hay que echarle cuenta e intentar ayudarle. Queremos intentar estar en la Copa Chenel este año, porque le ayudaría a abrirse camino y las puertas de otras plazas.
Con Mariscal Ruiz voy a seguir trabajando, esperando el debut con picadores al principio de esta Temporada. El 2023 fue el triunfador del certamen de «Camino hacia Las Ventas» y este año tendrá una novillada importante en Madrid. También estará en Sevilla, dada la dimensión que dejó en La Maestranza, tanto en la novillada de verano como en el festival que cerraba la Temporada. Es otro torero a tener en cuenta, además que se prepara a conciencia, sin dejar de entrenar ni un solo día. Puede con todo lo que se le eche, porque esta cuajado, tiene la capacidad y ha llegado por méritos propios, ganándoselo en cada plaza con un toreo puro y bueno. Este año ha toreado 24 novilladas.
Luego los más jóvenes, los que están empezando en la Escuela de Lucena, son Daniel Fernández y Mauro Macandro. Hay muchos más y hay que intentar movernos y dales novilladas para que puedan ir desarrollándose como toreros.
En definitiva, son toreros muy válidos, capaces de hacer que las faenas no decaigan a pesar de las condiciones que les hayan tocado en suerte.
Pido que nos tengan más en cuenta, porque cuando presento a alguno de los toreros que represento, lo hago con todas las consecuencias, siendo consciente de que están al nivel que se les exige y que van a dar la cara, que tienen capacidad. Podrán llegar a ser figura o no, pero tienen condiciones para ponerse delante del toro.
Estás amasando el futuro de la fiesta y tienes la suficiente perspectiva para hacer un balance de la fiesta ¿De qué salud dirías que goza? ¿Ves ese futuro y continuidad?
Hay pocos que se preocupen de amasar el futuro, no puede haber solo un loco como yo, tiene que haber más locos que tiren del carro y arrimen el hombro. Pero yo sí que veo la continuidad, si te acercas a cualquier Escuela Taurina lo verás, la fiesta del toro no va a decaer. Lo que sí nos hace falta es que entre todos apoyemos a la juventud, ponérselo fácil a todo aquel que quiera ir. Hay que atraer gente joven y enseñarles cómo es este mundo.
Esto no se va a perder si luchamos por ello, pero si no tiramos de las orejas al político de turno empieza a peligrar. Ellos llegan y quitan los toros de un plumazo, sin preocuparse en las consecuencias que acarrean sus decisiones. Esto nos hace muchísimo daño, así que para que no llegue ese extremo tiene que haber un bloque importante de gente que la defienda, porque ante una plaza llena, ningún político se atreverá a acabar con los toros. Todos tenemos que estar en un mismo camino y en una misma onda para que podamos hacer fuerza en común, incluso los medios, como en el caso de TVE.