Anécdotas Taurinas
LUIS MUÑOZ
Guarismo del ocho continúa con su sección, «Anécdotas Taurinas», con la colaboración de Luis Muñoz, totalmente altruista, que pretende compartir las historias más taurinas con los aficionados y seguidores de este portal.
¿Calma, embrujó, o don del misterio perenne? La naturaleza torera de Curro Romero la definió muy bien el dueño de la farmacia en la que Romero trabajó de chico para hacer los recados. El muchacho era cumplidor, pero lento, muy lento. Y, sobre todo, cuando le mandaban a algún aviso se retrasaba por las cosas de los toros, hasta el punto de pararse a ver una corrida por televisión en el casino. Así que, cuando Curro Romero fue anunciado por primera vez en un cartel, Don Pedro Fernández Conradi (dueño de la farmacia) lo miró detenidamente, contuvo el entusiasmo y sentenció:
– «Como seas tan tranquilo toreando como haciendo los recados, en cada corrida nos llevarás a ver la noche».
Curro Romero solo recuerda con emoción superior lo que, ese mismo día, le dijo su padre contemplando el cartel en el que estaba anunciado:
– «Antes de hacer el ridículo, déjate matar»
Curro Romero fue el torero que paró los relojes, paró el tiempo, un genio y los genios son así, para los genios no existe el tiempo.
FOTO: COLECCIÓN LUIS MUÑOZ